Si se considera a través del ojo de la realidad, la formación y cultura de las hijas es más necesaria que las de los hijos, pues estas niñas llegarán a la condición de la maternidad y moldeará la vida de los niños. La primera educadora del niño es la madre….

Por lo tanto, está bien establecido que una hija sin capacitación y sin educación, al convertirse en madre, será el factor primordial en la privación, ignorancia, negligencia y la falta de formación de muchos niños….

Esforzaos con corazón, con vuestra vida, para formar a vuestros hijos, especialmente a las hijas….

‘Abdu’l-Bahá, Tablets of ‘Abdu’l-Bahá v3, p. 579 (traducción de cortesía)

321