Dado que usted es médico especializado en obstetricia y ginecología, sus decisiones profesionales en este campo son frecuentes y difíciles. En cada caso su juicio como médico y su conciencia bahá'í deben guiarle a la decisión correcta cuando se contemple la esterilización permanente de un paciente. De las cuatro categorías que usted ha enumerado, sólo la primera, una enfermedad grave de la madre, se encuadra claramente en lo permisible desde el punto de vista bahá'í. En la segunda categoría, sólo los defectos genéticos graves, pero obviamente no todos los defectos genéticos, podrían ser considerados como causa válida para la intervención. En cuanto a la falta de medios sociales y financieras, y la anticipación de los niños sobrantes..., ninguno puede ser aceptable como razones para la esterilización permanente.

Lo que ahora puede considerarse como una forma de control de fecundidad familiar para algunos pacientes, son los métodos de intervención reversibles que, por lo tanto, no necesariamente llevan a la esterilidad permanente. Cuando se han empleado tales métodos, el deseo de los pacientes de tener más hijos, por cualquier razón, puede realizarse a través de una operación correctiva.

En nombre de la Casa Universal de Justicia, 18 de abril de 1982 :Lights of Guidance, p. 348 (traducción de cortesía)

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