En lo que respecta a su pregunta sobre la actitud bahá'í hacia la raza de color. Es más que evidente que el principio de la unicidad de la humanidad – el cual es el pivote principal alrededor del cual giran todas las enseñanzas de Bahá'u'lláh– excluye la posibilidad de considerar la raza como un obstáculo para cualquier tipo de interacción, sea social o de otra índole. La Fe, de hecho, por su propia naturaleza y propósito, trasciende toda limitación y diferencia racial, y proclama la unidad básica esencial de toda la raza humana. El prejuicio racial, cualquiera que sea su naturaleza o carácter es, por lo tanto, severamente condenado, y los amigos deben erradicarlo de todas sus relaciones, tanto personales como sociales.

En nombre de Shoghi Effendi, 16 de febrero de 1935: Lights of Guidance, p. 526 (traducción de cortesía)