También hay una distinción importante en la Fe entre la interpretación autorizada...y la interpretación que cada creyente tiene pleno derecho de expresar. Los creyentes son libres, de hecho se les recomienda, que estudien las Escrituras por sí mismos y expresen su comprensión de las mismas. Tales interpretaciones personales pueden ser muy instructivas, pero todo bahá'í, incluido el que expresa su punto de vista, por muy culto que sea, debe darse cuenta de que es sólo su opinión personal y no puede tenerse como una norma para que otros la acepten, y nunca debe permitirse que surjan controversias en torno a diferencias con respecto a tales opiniones.

La Casa Universal de Justicia, 03 de enero 1982

(traducción de cortesía)